Y lo han hecho a un ritmo tranquilo, pausado pero sin descanso, gozando en cada momento y en cada lugar, con ritmo, acompasando los alientos a pesar de algún otro grito…, sabiendo que cada movimiento era una sensación nueva que disfrutar y que gozar más de la anterior. Se han recorrido cada rincón de la geografía, como si de sus cuerpos se tratase, para alcanzar la máxima plenitud… Ese 38 Congreso Federal… Delegados. Esta vez sí… Esta vez, sí.
Carme Chacón, después de dar un paso atrás el pasado mes de mayo y quedar amputada para gozar de ese Bolero, ha dado un paso al frente porque ha creído que era lo que necesitaba su partido en estos momentos. Pero la trayectoria no ha sido fácil por la lluvia y esa «compañía» no bien vista. Después de todo, su mensaje ha sido ilusionante y movilizador: “levantemos a este partido, levantemos a este partido”. Ha querido hacer el amor con el Bolero de Ravel nada más y nada menos que con Alfredo Pérez Rubalcaba. Pero en la última nota de ese Bolero, en la última, quien ha gozado de la mayor satisfacción de la que se puede gozar ha sido el que fuese vicepresidente del pasado Gobierno español y su compañero.
Hoy ha sido el momento decisivo, el que el Partido Socialista Obrero Español esperaba. Y finalmente ha ganado la experiencia, lo que a principios de enero de este año Txiki Benegas llamó “el cambio con seguridad”. Rubalcaba ha sido elegido hoy Secretario General del PSOE con 487 votos, 22 más que Carme Chacón. Una fina línea que separa dos cambios en un partido que quiere tomar un mismo rumbo con nuevas fronteras. Un nuevo rumbo pero, tal y como ha declarado el propio líder, con un partido unido.
Rubalcaba y Chacón han hecho el amor con el Bolero de Ravel, esta vez sí, hasta el final…